La Reprogramación Neuromuscular es una técnica especializada de tratamiento fisioterápico que trata de devolver a la persona a un estado de armonía estructural, postural y energético. Se utilizan técnicas específicas de la terapia Vojta, terapia miofascial, osteopatía craneosacra y kinesiología holística.
Con el trascurso de los años sucede que nuestro cuerpo se va desmoronando y desordenando vencido por la fuerza de la gravedad y otros factores ambientales, porque nuestra musculatura postural profunda es incapaz de mantener la posición erguida y enderezada que habíamos conseguido durante los primeros años de nuestra vida (excepto en casos patológicos de la infancia). De esta manera otros músculos más superficiales y no diseñados para cumplir con esa función tratarán de mantenernos en una posición lo más erguida posible, pero lo harán de una forma parcial e incorrecta, acompañada en la mayoría de los casos de dolor y limitaciones.
Aparecerán como consecuencia:
- Mala alineación de la columna vertebral en los 3 planos del espacio (escoliosis, hiperlordosis, hipercifosis).
- Mal posicionamiento de pelvis, hombros y caderas.
La sintomatología que se manifiesta puede ser de lo más variada:
- Tendinitis e inflamaciones articulares.
- Contracturas musculares crónicas y recurrentes.
- Pérdida de recorrido articular y movimiento.
- Disminución de la fuerza muscular.
- Equilibrio y control postural alterado.
- Artrosis por mal centramiento articular.
- Hernias discales, subluxaciones vertebrales.
- Dolor de diferentes tipos y localizaciones.
¿En qué consiste la terapia?
El fisioterapeuta evaluará la postura del paciente y le pedirá hacer movimientos sencillos y conforme a sus observaciones, planificará y explicará el tratamiento.
El fisioterapeuta colocará al paciente en posiciones bien definidas y aplicará presiones manuales suaves en diferentes partes del cuerpo, a través de las cuales hará un llamamiento al sistema nervioso central a través de estímulos propioceptivos, provocando respuestas de activación neuromuscular que harán que la musculatura postural vuelva a saber “qué es lo que tiene que hacer” para mantener el cuerpo enderezado y colocado correctamente(“reseteo” del sistema neuromuscular).
Después de las sesiones habrá cambios en la postura, más elasticidad y ligereza, mayor recorrido articular, menos bloqueos vertebrales, menos asimetrías y dolor, y aumentará el control postural y equilibrio.
Otros efectos a nivel fisiológico:
- Disminución del estrés y ansiedad debido a la estimulación del sistema nervioso parasimpático.
- Estimulación del sistema inmunológico.
- Aumento de la capacidad respiratoria.
- Mejora de la circulación sanguínea y linfática.